Tengo miedo

Esta hecho he empezado a buscar una oportunidad en otro lado.

Tengo miedo.

Tengo miedo. La tarde es gris y la tristeza
del cielo se abre como una boca de muerto.
Tiene mi corazón un llanto de princesa
olvidada en el fondo de un palacio desierto.

Tengo miedo -Y me siento tan cansado y pequeño
que reflejo la tarde sin meditar en ella.
(En mi cabeza enferma no ha de caber un sueño
así como en el cielo no ha cabido una estrella.)

Sin embargo en mis ojos una pregunta existe
y hay un grito en mi boca que mi boca no grita.
¡No hay oído en la tierra que oiga mi queja triste
abandonada en medio de la tierra infinita!

Se muere el universo de una calma agonía
sin la fiesta del Sol o el crepúsculo verde.
Agoniza Saturno como una pena mía,
la Tierra es una fruta negra que el cielo muerde.

Y por la vastedad del vacío van ciegas
las nubes de la tarde, como barcas perdidas
que escondieran estrellas rotas en sus bodegas.

Y la muerte del mundo cae sobre mi vida.

Pablo Neruda

Diario de sueños

Soñé que iba en el metro a trabajar, me habia levantado temprano para poder llegar pronto.
En una parada me doy cuenta de que no reconozco el nombre de la estación y creo que me he pasado y salgo corriendo del vagón.
Al salir si que reconozco la calle,y se que debí haberme bajado un par de paradas mas adelante y quiero volver al vagón pero se cierran las puertas y ya no puedo entrar así que decido ir andando al fin y al cabo no debo estar demasiado lejos.
Camino por una calle hasta una plaza arbolada que cruzo, vuelvo a estar desorientada y entro en una pastelería (degustacion) en la que hay gente desayunando.
Todo tiene un aspecto delicioso, me gustaría mucho tomarme algo en alguna de aquellas mesas pero me digo que no debo comer dulce y ademas tampoco tengo tiempo para eso, si me quedase no llegaría a tiempo.
Hay un hombre mayor sentado en una mesa en el centro de la cafetería, esta solo y me sonríe, me acerco y le pregunto por donde debería ir para llegar al trabajo.
Me indica que debo subir cuatro calles y sigue hablándome. Hay algo que no está bien en él, creo que su cabeza no está demasiado centrada pero como no tengo mas indicaciones lo intento aún a sabiendas de que es casi imposible que sean correctas.
Subo y subo y a cada paso voy viendo claramente que por ahí no conseguiré llegar, así que me vuelvo hacia abajo, hacia el parque a intentar encontrar el camino.

Naufragio

La clase de ayer me trajo a la memoria este microrrelato de Ana Maria Shua

Naufragio

¡Arriad el foque!, ordena el capitán. ¡Arriad el foque!, repite el segundo. ¡Orzad a estribor!, grita el capitán. ¡Orzad a estribor!, repite el segundo. ¡Cuidado con el bauprés!, grita el capitán. ¡El bauprés!, repite el segundo. ¡Abatid el palo de mesana!, grita el capitán. ¡El palo de mesana!, repite el segundo. Entretanto, la tormenta arrecia y los marineros corremos de un lado a otro de la cubierta, desconcertados. Si no encontramos pronto un diccionario, nos vamos a pique sin remedio.

Ana Maria Shua

Diario de sueños

Soñé que mi abuela moría, quizás debería decir soñé que mi abuela volvía a morir, porque ella lo hizo en el mundo real en 2005.
Estaba tumbada en lo que parecía ser el ataúd solo que no se parecía en nada a un ataúd sino que era igual que una cama.
No estaba triste. Ella tenia el aspecto de una persona dormida plácidamente, tal y como la he visto cientos de veces durante los veranos en los que compartíamos habitación, tenia el mismo aspecto de los ultimos años, incluso todavia llevaba las gafas puestas.

Era de noche y la llevábamos por la calle desde su casa al lugar donde se celebraría el funeral en aquella enorme cama con un altísimo cabecero de madera color miel esculpido con ramas, hojas y representaciones de animales. Era algo tan maravilloso que no podía dejar de mirar cada detalle. Al verme asi tan extasiada alguien me dice
– Ese cabecero lo HA hecho tu abuelo.
Como que lo ha hecho? si mi abuelo lleva muerto casi 30 años! como va ha haber hecho esto para mi abuela?

Diario de sueños (el resumen)

Hace mucho tiempo que no escribo entradas del diario de sueños, no es que hayan faltado, la verdad es que ultimamente duermo poco, a saltos y muy agitada.

En parte es que mis piernitas, sobre todo la izquierda (que siempre es la que mas guerra da) no para de molestar en cuanto intento relajarme un poco en el sofa o me meto a la cama, me arde, me hormiguea y se mueve sola, asi que me es un poco mas dificil dormirme como antes.

En cuanto a los sueños ha habido una especie de progresion comence soñando que me robaban, el coche, las botas, la ropa… despues que me quitaba todo el pelo de las cejas, anteayer hacia las maletas porque tenia que salir del pais sin saber si podría volver algun día.

Anoche fue mas directo, habia alguien sentado en mi cama junto a mi, algo me decia que debia despertarme entonces me di cuenta de que esa persona estaba tratando de pincharme en el costado, intente impedírselo pero lo único que conseguí fue romper la aguja y que ésta se clavase aún mas.

Me ha despertado el dolor intenso de ese pinchazo en el costado derecho.

Tango

El viernes acudí a mi primera clase de tango. Tuve suerte, un caballero se ha quedado sin pareja y parece ser que a partir de ahora bailaré con el, la gran ventaja es que él ya sabe.
Me sorprendió ver que hay muchas cosas que he aprendido en taichi que para bailar me son útiles,  la postura, el cambio de pesos incluso a interpretar cuando tu pareja se mueve y hacia donde quiere que vayas.
Me apetece por una temporada un poco de suavidad, que me lleven y que me traten como a una dama.

Me gustaria


– Darme un baño en la playa (sí en este tiempo y aunque me quede helada)
– Un fin de semana lejos y a solas
– Recorrer la distancia que separa mi casa de bilbao a pie.
– Lo mismo pero hasta castro
– Lo mismo pero recorriendo algunos castillos con la mochila al hombro.
– Volver a hornear pan
– Hacer algo con las manos y que quede bonito.
– Enloquecer un poco en el sentido mas ludico de la palabra
– Y algunos deseos tan inconfesables como imposibles de alcanzar que ni aquí tienen sitio.